¿Habías oído hablar del movimiento Plastic Free July®? Desde su nacimiento en el 2011, esta iniciativa ha llegado muy lejos: cada año millones de personas se unen a ella para reducir la contaminación por plástico en las calles, comunidades, océanos, mares y cualquier otro lugar del mundo.
En su web dan ideas para reducir el plástico de nuestra vida diaria, desde pequeños retos como utilizar vasos de café reutilizables, cambiar el jabón líquido envasado por pastillas de jabón, o evitar los alimentos empaquetados con plástico optando por la compra a granel o el envasado en papel. Los participantes se pueden «unir al reto» para compartir con otras personas trucos, ideas y anécdotas sobre cómo lo están consiguiendo.
Pero no solo las personas se pueden unir al reto del #PlasticFreeJuly: También hay ideas y retos para empresas, como evitar el packaging de plástico de un solo uso, implicar a clientes y personal en el reto del #PlasticFreeJuly, evitar los plásticos de un solo uso en los servicios de comida o ayudar a difundir la propia campaña.
En Pasqual Arnella hemos querido hacernos eco de este movimiento, porque… ¡Cuantos más, mejor! Nos sentimos muy alineados con la filosofía del movimiento, ya que desde hace años no solo fabricamos maniquíes de pasta de papel reciclado, sino que intentamos que tanto nuestros procesos como nuestro packaging también respondan a criterios de sostenibilidad. ¿Cómo lo hacemos?
Nuestro proceso de producción es #PlasticFree
En primer lugar, nos preocupamos de que el origen de nuestras materias primas sea FSC, y reducimos cada vez más el uso de químicos. Además, no utilizamos materiales derivados del petróleo en nuestros elementos auxiliares.
En la fabricación y embalaje de nuestros maniquíes, usamos pintura de base acuosa, y las conexiones del maniquí son de materiales nobles como la madera o el hierro. También reutilizamos todos los materiales posibles, como las latas de pintura, el cartón sobrante de las cajas de los envíos o la madera que trabajamos. Y por supuesto, nuestro embalaje: empaquetamos todos nuestros maniquíes en cajas de cartón y protegidos dentro de bolsas de algodón reutilizables, y con materiales fabricados por proveedores locales, minimizando así la huella de carbono.